
Siempre he considerado a Alex de la Iglesia como un director con un talento visual increíble, unos guiones que te sorprenden por su originalidad y te cortan la respiración en su desarrollo. Todo esto no hace más que confirmarse en esta Balada triste de trompeta.
La película comienza en el Madrid de la Guerra Civil. De la Iglesia nos guía por una trepidante secuencia de batalla cuerpo a cuerpo entre nacionales y republicanos, y de por medio, un payaso con un tutu rosa (Santiago Segura) combatiendo con un machete. De esta magnífica secuencia somos trasladados al año 1973 (justo antes de la Transición), con un payaso triste (Carlos Areces) trabajando en un circo con el payaso tonto (Antonio de la Torre), ambos enamorados de la chica de la tela (la espectacular Carolina Bang) que es la mujer del payaso tonto . El payaso tonto es un psicópata que maltrata a su mujer, esto hace que el payaso triste decida defenderla, lo que creara un conflicto fatal entre ambos y hará que el payaso triste olvide quien era.
Sin duda la mejor película de Alex de la Iglesia, mezcla sentimientos, risas macabras y terror de una manera perfecta y admirable. El reparto es espectacular, con un genial Carlos Areces, el descubrimiento de Alex de la Iglesia de esa increíblemente sexy Carolina Bang en su papel de trapecista masoquista y por ultimo ese gran actor que ya me deslumbro en Gordos y en Azuloscurocasinegro llamado Antonio de la Torre en su papel de payaso tonto que aunque cariñoso con los niños cuando esta fuera del escenario es un psicópata sin compasión.
La estética de Balada triste es poderosa, con una espléndida fotografía que recuerda a un comic con un exquisito diseño. Los payasos nos sirven como metáfora para ver las divisiones en un país de envidiosos en el que lo que todo el mundo quiere hacer es reírse de las desgracias ajenas como un payaso, a veces tonto por reír y otras triste por sufrir las desgracias con las que otros se divierten. Y como telón de fondo esa España hortera de los setenta. En definitiva su mejor película que vuelve a los origenes de El dia de la Bestia, perfecta por su imperfección, hecha desde las entrañas y sin concesiones ni indiferencia. Puro Alex de la Iglesia. Pura obra maestra.
Esta tarde de domingo he ido a ver la peli basandome en la critica de Miguel y siento disentir, no me ha gustado nada, he estado a punto de levantarme e irne hacia la mitad de la peli. Me ha puesto los pelos de punta, me ha parecido desagradable y poco creible, supongo que Alex de la Iglesia no hace las pelis para que sena creibles pero yo personalmente no la recomendaria en ningun caso
ResponderEliminarMenos mal que alguien se atreve a poner a Conejero en su sitio. ¡Bravo Blanca! Me ha dado la sensación en casi todo el metraje de estar viendo fragmentos de otras obras de Alex. Me explico. La trágica dualidad payasil me recuerda en exceso a "Muertos de risa", las secuencias de tiroteos a "Acción mutante", el coro de secundarios a "La comunidad", si cambias la cruz del valle por el cartel de schweppes tenemos "El día de la bestia".
ResponderEliminarDel elenco sólo salvo a De la Torre, el resto me resultan televisivos (en el peor sentido del término). La señorita Bang (dejando de lado su deforme rostro) me parece de un único registro (ojos abiertos como platos).
Salvo de la quema algunos pasajes escabrosos y el arranque que me parece brillante y me deja con el interrogante de cómo hubiera sido el film de haber seguido por ese derrotero.
No entiendo a Venecia...
La película es demoledora, impactante, esperpéntica, visualmente brillante, … e imperfecta. Pero con la imperfección de todas las obras que arriesgan. Y Balada arriesga mucho.
ResponderEliminarSí entiendo la crítica de Blanca, ya que la película es dura, a veces atroz y desde luego difícil. Alex de la Iglesia gusta o repele, no suele haber término medio y entiendo que a Blanca no le gustara.
Pero en cambio estoy completamente en desacuerdo con la crítica de Kenobi. Decir que existen fragmentos que son repeticiones de otras películas de Alex de la Iglesia, es como criticar a Scorsese por tratar el tema de la mafia en varias de sus películas o decir que Hitchcock se repite en “Con la Muerte en los talones” y en “Sabotaje” al usar el Monte Rushmore y la Estatua de la Libertad para las escenas finales.
Donde para mi falla la película es en algunos errores de guión que hacen perder la complicidad del espectador. Cuando alguien plantea una trama principal basada en lo absurdo, como en este caso, una regla de oro es mantener una lógica implacable en todo lo accesorio.
La película de Matrix funcionaba no porque la idea principal fuera creíble (¿alguien en su sano juicio se creería que el mejor método de obtener energía es poniendo granjas de hombres?), sino porque el resto de la historia tenía una lógica perfectamente sólida, una vez asumida la idea principal. Como decía Polonio en Hamlet “Though this is madness, there is method in it”.
Cuando los detalles no están cuidados, el público pierde la complicidad y se distancia de la película. Esto es lo que creo que le ocurre a Balada.